Un Ripstein a sangre fría
Staff @LoftCinema
¿Qué tanto influye el apellido Ripstein?, le preguntaron a Gabriel, al presentar su ópera prima 600 Millas en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara, su respuesta fue contundente:
“Tengo mucha fortuna de pertenecer a una familia que pertenece al cine. Pero siento que es un cine muy distinto, no te podría decir si es generacional; pero retratar la problemática mexicana de la forma en que lo hago en 600 Millas surge de la búsqueda de la coherencia, busqué cual sería la forma de hablar de esto de una manera responsable”.
Su cinta, que trata del conflicto del tráfico de armas en la frontera México-Estados Unidos, y que ya fue premiada en el festival de Berlín, no muestra un estilo que se parezca al cine de su padre y es quizá por ello que sorprende y encanta aún más.
“Busqué todo tipo de coherencia, nada fue dejado a la suerte, desde qué fotógrafo me podía ayudar a retratar esto y por eso lo elegí”.
Sus orígenes cinematográficos se ven reflejados en su narrativa, pero su propia personalidad se impone.
“Mi papá me inspira en el plano secuencia, pues he encontrado a través de este lenguaje cinematográfico una aproximación de coherencia y responsabilidad de contar una historia preocupada por mostrar la realidad de dos personajes que están ahí, Krystian Ferrer y Tim Roth, quienes fueron muy generosos con su trabajo”, declaró.
La cinta ha impactado tanto críticos como a cinéfilos y se perfila como una de las favoritas para llevarse el Premio Mezcal.
Frase:
“Por mi cabeza pasan historias de personajes, no de sociedades , de hombres y mujeres en realidades y así lo hice.
Tuve libertad absoluta”,
Gabriel Ripstein,
director